Yulián Mejía Chaverra
Yulián Mejía por estos días hace un receso en su recorrido profesional y disfruta de su Escuela de Formación Deportiva en el barrio El Salvador de la ciudad de Medellín, tuvo la idea de conformar hace poco más de un año una Escuela de Fútbol que lleva su mismo nombre para transmitir sus experiencias con los nuevos amantes de la redonda. Comenzó con pocos niños, pero en la medida que ha pasado el tiempo la cancha de arenilla de su barrio de origen ha ido creciendo gracias al buen trabajo que se viene realizando con los futbolistas de base, de hecho actualmente cuenta con 235 alumnos, esta temporada van a participar en los Torneos LAF con una categoría de niños del año 2014.
Siente que no está en edad de retirarse definitivamente del fútbol de alta competencia, viene de recuperarse de una lesión que lo marginó de su último equipo internacional el Unión Española de Chile. Mientras espera una nueva posibilidad en el fútbol trabaja con los niños y a la par se prepara físicamente para estar en forma en el momento que salga una nueva oportunidad, pues con 32 años es un deportista que para el balompié anda en edad propicia para seguir en el fútbol élite.
Yulián desde niño acarició la pecosa, siempre tuvo sensibilidad con su pierna zurda y utilizó sus condiciones técnicas para ser un medio centro ofensivo conectado permanentemente con el gol por su potente pegada, los Torneos Departamentales de la Liga Antioqueña de Fútbol pulieron su técnica y le dieron la posibilidad no sólo de ser siempre figura en las canchas del fútbol aficionado, sino también de incursionar en el Fútbol Sala FIFA, pero decidió interactuar más con la numero 5 y la competencia en terreno grande, estuvo en una preselección Antioquia, la que dirigía Carlos “fututo” Paniagua, desafortunadamente no quedó en la lista definitiva.
Su recorrido en el fútbol profesional ha sido amplio, debutó en el año 2008 en el Girardot Fútbol Club de la división de Plata del fútbol colombiano, allí estuvo dos temporadas, luego pasó a hacer parte del Depor Aguablanca del Valle por un año, para el 2011 hizo parte de la “cantera de héroes”, dos años después se fue al fútbol internacional para actuar en Tigre de Argentina, retornó al fútbol colombiano para vestirse de rojo con Independiente Medellín hasta el 2014, tuvo la fortuna de ponerse las casacas de Tolima, Nacional, Millonarios y Bucaramanga, sus dos recientes experiencias fueron en el fútbol de afuera con Sporting Cristal del Perú y el ya mencionado Unión Española del país austral.
En su carrera deportiva ha jugado 263 partidos y ha marcado 46 goles, tiene en su haber títulos como el de la Copa Colombia con Tolima 2014 y Liga 2015 con Atlético Nacional, además, tres vueltas olímpicas con el Sporting Cristal en el 2018, torneo de Verano, torneo Apertura y primera división. Su buen recorrido por los campos del fútbol amateur los inició con el club Campo Amor, luego Arco Zaragoza y antes de ser futbolista profesional hizo parte del club Ferroválvulas, en este último fue campeón con las categorías Sub-21 y Primera A.
Cuenta con la fortuna de disfrutar llenos de salud a sus padres Antonio José y Maria Ofelia, al lado de sus hermanos Sandro, Weimar, Janeth y Sandra, hoy vive con su esposa Shirley de cuya unión están María Paz y Maxi, quien con apenas 6 años fue campeón con el Club Deportivo Estudiantil de la categoría Sub-7 de los Torneos LAF 2022.